domingo, 21 de julio de 2013

¡FIN DE CURSO EN VALENCIA!

     La comunidad de Valencia se acerca a vosotras hermanas para contaros  el final de curso de todas nuestras actividades pastorales;  ¡un fin de semana de “aupa”!, ¡todas conocemos esta sensación!, ¿verdad?, pero luego, tras la recuperación…  jaja,  podemos compartir con alegría los milagros que el Señor sigue haciendo alrededor de nuestra familia, ¡ya mismo os desvelamos la razón!
     Pues bien, nos fuimos de excursión al Desierto de las Palmas un grupo de lo más variopinto: familias con sus hijos discapacitados de nuestra comunidad de Fe y Luz; nuestro párroco y gente de la parroquia; colaboradores del taller misionero de la ONGD; cinco chicas discapacitadas del cotolengo, y la familia de Inma. Al llegar el P. Alfonso nos acogió y nos explicó de forma muy agradable la historia del Monasterio carmelitano y el museo. Después nos instalamos en el albergue juvenil, juntamos mesas y compartimos la comida que traíamos; y a continuación empezó la acción, ¡el juego de Santa MªRosa Molas! Bueno, bueno, esto fue el despliegue de la creatividad, la sencillez, la ilusión… a través de distintas pruebas los equipos iban consiguiendo trozos de la vida de la Madre para después contestar un test con opciones muy graciosas.            Pudimos ver a todos mezclados, ayudándose, prestando atención a los discapacitados, y disfrutando de hacer de todo, por ejemplo como la Madre tuvo que ver muchas guerras, tuvieron que hacerse con papel trajes de generales y desfilar todos a ritmo de la marcha militar… y después del tiempo fraterno, disfrutamos de la belleza del paisaje, y de una forma especial, nuestra capilla fue la naturaleza con vistas al Mediterráneo, allí nos acercamos al que nos había convocado y unido a tan distintas personas: Jesús.
      ¿Y el milagro? Conocéis ese versículo de Isaías: <<… habitará el lobo con el cordero… >>; pues eso, en la excursión se unió gente que entre ellos no se conocían, y sin embargo, todos estuvieron pendientes de todos, de forma especial de los discapacitados, y se creó un ambiente de amor unos con otros, de familia, de naturalidad, y sencillez. Así que todos damos gracias a Dios por la vida que nos regaló ese día, y por el bien que nos hizo.
      Llegamos, dormimos, y al día siguiente, rapidín a comprar bebidas y pan, ya que teníamos el concierto de verano de DELWENDE organizado por Ester Bernat. Nuestras hermanas Nati, Carmen, y Josefina Sanchiz se pusieron manos a la obra para preparar los bocadillos que el coro nos había encargado para cenar; mientras el resto preparaba todo los artículos artesanales que los colaboradores hacen en el taller misionero. ¡Fue un conciertazo!, inagurado con las palabras apasionadas de Ester y Almudena, y el resto fue dejarse llevar por un hilo musical de la más alta calidad a la más graciosa interpretación de la niña que cantaba “la gallina cocoguagua”; y mientras fuera estaba nuestro puesto, cuyas ventas se desbordaron a la hora de la merienda con los bizcochos preparados por Josefina Escrig. ¡Un éxito!, y todo esto gracias a las personas que los sábados vienen a casa a coser, a recortar, a hablar… cada uno con sus dones y sus necesidades, pero todos trabajando por los más pobres. Así que también con mucho que agradecer a muchas personas que forman parte de nuestra familia de Consolación aquí en Valencia.
      Así que por aquí continuamos con nuestro intento de ser presencia de la Consolación de Dios… Un abrazo a todas: vuestras hermanas de Valencia.