Esta
Navidad hemos disfrutado otro año más de pasar unos días de
convivencia en la residencia de mayores San Antonio, Lahiguera
(Jaén).
Para mí
el broche ideal en estos días navideños, donde desde el primer
momento se nos recordaba “mirar” desde la Capacidad y no desde
la Discapacidad. Disfrutamos de una tarde compartida con La
Integral Psicodanza , conociendo
otras formas de comunicarnos con los demás y ser conscientes de que
nadie sabe de lo que es capaz hasta que lo intenta.
De
vuelta a la residencia, los ancianos nos esperaban con los brazos
abiertos. Hemos compartido tardes de cocina, de bailes, concurso de
coplas, bingos, ratos de charlas y dominós… Además del momento
mágico de la llegada de los Reyes Magos, esperadísimo por nuestros
abuelos y abuelas que recibieron a sus Majestades, adoraron al Niño
Jesús y disfrutaron y se alegraron con sus regalos.
Es
especial experimentar cómo los abuelos nos han transmitido
entusiasmo, alegría, sencillez… volvemos a casa con un trocito de
ellos en cada uno de nosotros.
No puedo
acabar sin hacer mención al ambiente que se creó entre los jóvenes
y Hermanas que participaron en esta aventura, junto con las
trabajadoras… gracias a ello estos días han sido aún más
especiales.
Destacando
alguno de los momentos vividos “en comunidad”, mencionar la
oración del sábado, la cual nos ayudó a recoger algunos de los
sentimientos y sensaciones vividas; Y el momento en el que cada uno
de nosotros compartió desde diferentes manifestaciones artísticas
lo que esto les transmitía. Fue un momento muy emotivo que nos hizo
vibrar y llegar al otro gracias al arte.
De nuevo
gracias a todos con los que compartí esos días y me despido con una
frase que os sonará… “desconectar
para soñar”.
Hasta la
próxima, Ani Jiménez
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